Y las empresas Mexicanas no se quedan atrás. D.O. presente en Televisa.

Seamos animales, insectos, humanos... Siempre tendremos que organizarnos de alguna forma.

Sólo podemos afirmar que como organización vamos creciendo... ¡Ah! Y que King Kong es un baile muy sensual.

El campo de la psicología organizacional y su presencia en México.

Detrás de la frase “en nuestra empresa, los empleados son lo más importante” se abriga una estrecha relación con la maquinaria, los sistemas, las normativas, los recursos  financieros y económicos y los seres humanos. Claro y eso sí, los empleados siempre serán lo más importante para los directivos siempre y cuando las utilidades de la empresa no estén en peligro y mucho menos su prestigio como jefes.

En la mayoría de las empresas, sean del índole que sean siempre se va a encontrar como parte de los ellas la psicología organizacional, ya que ella vendría siendo el medio para lograr lo que toda empresa anhela. El sueño al que toda empresa aspira sería algo así: Empleados involucrados al nivel que ellos mismos quieran aportar y ver crecer a la empresa participando activamente y aportando ideas nuevas, así mismo motivación en ellos como  una actitud permanente, siendo  los directivos un modelo a seguir y de ejemplo. También tendrían la unión como prioridad, procurando que todos los empleados se lleven bien, evitando los chismes de pasillo, las enemistades y los malentendidos y si los hubiese arreglarlos de una manera discreta y funcional, todo esto por medio de una cultura de cambio, que tanto los empleados como los directivos estén dispuestos a hacer y deshacer cuando sea necesario para el bien de la empresa y por supuesto, rebozar de creatividad para llevar a la cima a dicha empresa.

Pero y a todo este divague… ¿qué es la psicología organizacional? Muchos pensarán (y me incluyo en este pensamiento erróneo) que es exactamente lo mismo que la psicología industrial. Si bien su nacimiento se da en las industrias no sólo se queda estancada ahí, sino se expande hacia muchas instituciones que estén regidas bajo el orden de trabajar en grupos.

La psicología organizacional se consolida en los 70 y el punto clave a tratar es cómo individuo por individuo, empleado por empleado, crean una reacción en cadena que puede afectar de manera positiva o negativa a la empresa. Dicho en otras palabras los sentimientos, emociones, actitudes, valores, etc., de una persona ya sea consigo mismo, con otra persona o con un grupo crean una relación, y es esa relación la que puede repercutir el entorno de ese grupo, ya que, al establecerse la interacción ya estamos hablando en el sentido de una organización. Esa repercusión es lo que le interesa a la psicología organizacional, el “cómo” repercute en la producción, en las actitudes, en la toma de decisiones, en el liderazgo, en la motivación de los empleados o de los miembros de dicha organización.

Si bien a alguien hay que agradecerle por arrojar luz hacia el punto clave de la psicología organizacional, ese debe de ser W. Schutz, ya que él fue quien dirigió toda su atención a descubrir quién era la persona que podía hacer más o menos productivos a los grupos  y fue ahí donde se dio cuenta que no sólo afectaba en la productividad sino también en otras cosas más importantes como el autoestima y la motivación, y por supuesto, como toda causa y efecto, si queríamos llegar a conocer el porqué de la manera en que se formaban los equipos de trabajo, si existía desgano, temores e inquietudes se debía de llegar hasta la cabeza de la organización, es decir, al líder. Y es aquí donde se recalca la importancia de la psicología organizacional, ya que nos permite ver desde el interior para poder comprender el exterior.

¿Y con quién se lleva?

La psicología organizacional necesita mantener contacto con otras disciplinas para poder aportar mutuamente con ellas tanto lo que descubre, como las bases que necesita saber para lanzarse a la búsqueda de algo. Es así como llegamos a su relación con la psicología social, necesita a la psicología social porque estudia grupos, y los grupos no pueden ser grupos sin una sociedad y en una sociedad la gente se influye entre sí, y eso es lo que le interesa a la organizacional, conocer porqué los hechos psicológicos están influidos por las actividades psicológicas de otros.  Ahora bien,  a la sociología sólo le interesa cómo funciona la organización en sí y a la antropología le interesa sólo el estudio del hombre y sus procesos psicológicos internos sin la necesidad de que se encuentre en una organización, así pues, de ambas la psicología organizacional toma eso, pero añadiéndolas entre sí, es decir, conocerá como funciona la organización externamente, pero así mismo conocerá los procesos individuales que llevan a dicha función externa.

¿Y qué más hace?

Básicamente, la psicología organizacional desempeña cuatro papeles principales:
 [Investiga] Una investigación aplicada mucho más recurrente que la básica, a fin de que lo que sucede pueda llegar a tener un total entendimiento.
 [Orienta] a seguir las reglas, a crear nuevas estrategias de crecimiento, y a la motivación de las organizaciones.
 [Medida] Sirve como un parámetro para diagnosticar y evaluar el camino que los proyectos, cambios y funciones de una organización.
[Agente] que conforme lo observa, junta y explica los conocimientos, habilidades, herramientas y estrategias que llevan al éxito una vida organizacional.

Principalmente la investigación tanto básica como aplicada así como las preocupaciones, problemas de los grupos, instituciones e individuos mismos constituyen lo que son los insumos, los cuales son necesarios para que la psicología organizacional pueda justificar y lograr su propósito. Mientras que cualquier cambio, ya sea económico, social o cultural , someterá a la psicología organizacional a un reto el cual deberá superar.

¿Cómo beneficiará la psicología organizacional a mi organización?
*Incrementando la motivación mientras se motiva a los que colaboran en dicha organización, fomentando el logro de sus metas, sueños y objetivos.
*Beneficiando la productividad mediante la eficiencia de las personas involucradas en la organización, esto mediante el crecimiento de las personas, de sus grupos y de la organización misma.
*Fortaleciendo y mejorando el liderazgo, para aquellos que tienen que ser ejemplo para las personas, respetando y llevando a cabo las políticas y  procesos.
*Desapareciendo las barreras psicológicas para poder llevar a cabo una excelente toma de decisiones procurando así una mayor participación productiva por parte de los empleados.

Detrás de todo beneficio hay beneficiarios, y con la psicología organizacional no es la excepción, algunas de las áreas que se benefician de manera especial son las áreas de administración, más conocidas como las áreas de recursos humanos. Por supuesto que de igual manera las áreas de mercadotecnia, así como el departamento de desarrollo organizacional. También el departamento de control como las áreas de planeación, organización y toda la ingeniería industrial reciben ciertos beneficios.

La eficacia de la psicología organizacional depende sobre todo del hecho de que la dejen actuar, sin limitarla, sin cerrarla a las posibilidades. Nosotros como individuos podremos dar lo mejor de nosotros si nuestro ambiente laboral nos motiva a ello, podemos llegar a ser muchísimo más productivo si nuestro desarrollo no es sólo autónomo sino que alguien más me instruye a crecer. Para poder llegar a ser productivos en una organización necesitamos tanto de trabajadores que amen lo que hacen, clientes interesados y atraídos por dicha pasión y por supuesto, jefes que sepan invertir y organizar desde adentro.

¿Y LAS EMPRESAS EN MÉXICO?

Si se trata de la actividad exportadora, México es un país que se destaca sin lugar a dudas, pero ¿qué pasa si hablamos de importar o de competitividad? Tristemente, los empresarios de México no tienen una visión lo suficientemente amplia para no conformarse con una simple exportación sino con una competencia internacional que bien nos podría resultar favorable.

¿De chile de dulce o de manteca?

Si mencionamos las empresas que destacan a nivel tanto nacional como internacional sin duda alguna estamos hablando de las de chile. Estas empresas no sólo tienen un desempeño sobresaliente sino que también se convierten en un ejemplo a seguir. Entre ellas podemos mencionar al grupo industrial Bimbo quien no sólo se ha destacado por su liderazgo sino por la expansión de productos y mercados. También Cemex se coloca la medalla al ser una de las diez mayores empresas cementeras del mundo. Así mismo Televisa se convierte en una de las potencias televisivas de toda la habla hispana. Pero ¿cuál es el secreto de estas empresas? Realmente no hay ningún secreto, sino que, para quienes trabajan en esas empresas la motivación inunda los pasillos, los proyectos que se desarrollan promueven el liderazgo, la toma de decisiones y las oportunidades. La comunicación, la modernización y la capacitación en estas empresas no son opciones sino requerimientos con los que debe cumplir la organización.

Compañías que han tenido grandes esfuerzos, pero no han podido lograr del todo sus objetivos, esas, son las de dulce. Encabezando la lista encontramos a Telmex (Teléfonos de México), quien al comenzar era una de las empresas modelo de corrupción, maltrato e ineficiencia sin embargo ha ido logrando avances con respecto a la mejoría de sus servicios, aunque las quejas no han desaparecido del todo. Lo mismo sucede con las empresas de Turismo y Bancarias, se han proyectado tantas imágenes de incompetencia e ineficiencia que se han colocado en un lugar menor al que deberían obtener. ¿Y qué está mal con estas organizaciones? No hay nada mal, más bien existe ausencia de algo, en estas organizaciones se escuchan con frecuencia propuestas, ideas y proyectos que propiciarían el cambio que mejore tanto las condiciones de los empleados como la imagen de la empresa, sin embargo, los altos directivos no tienen idea de estas propuestas ni ideas, no llegan a sus oídos, y sin ello, no llegan siquiera a cuestionarse si su liderazgo está motivando o desmotivando a sus empleados, para ellos, los empleados sólo son las manos que hacen y ellos la cabeza que piensa.

La incompetencia se traduce en las empresas manteca. El caso más claro que podríamos tener es el de la empresa juguetera que ante la llegada de artículos importados, no tardó ni cinco años en desaparecer, lo cual llevó a un incremento de desempleo como resultado. Un caso irónico es la industria petroquímica, ya que, nosotros producimos el petróleo, pero lo enviamos al extranjero para que se nos regrese convertido en otros productos los cuales adquirimos por un precio más alto. Y sin palabras respecto al chocolate, México uno de los mayores productores y sin embargo no tenemos ninguna empresa reconocida a nivel internacional. Estas empresas se encuentran bajo un liderazgo inconsistente, que trata de llevar a los empleados más a una dinámica familiar que laboral, y consigo lleva los pros y los contras.

¿Puede intervenir la psicología organizacional?

El terreno de la psicología organizacional, se encuentra en lo que Maslow describe como una necesidad de disciplina, frustración, privación, tragedia en sí, pero que sin embargo puede llegar a ser positiva si se permite la relevación de la propia naturaleza inherente, es decir, si se permite un desarrollo sin limitaciones. El propósito principal de una empresa, es crecer en ella, tanto interna como externamente, de una manera sana, productiva y feliz, cuando esto no sucede, dependiendo del nivel de desarrollo de las empresas, es posible que exista una táctica de acción de la psicología organizacional para dicha empresa.

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